Gonzalo Quesada: gestión de equipos

En la serie de capacitaciones que la UAR está realizando a través de su cuenta de Instagram (@unionargentina) el head coach de Jaguares, Gonzalo Quesada, expuso sobre gestión de equipos y toda su experiencia como entrenador en Francia y ahora en nuestro país.

Este es un resumen de lo que dejó la charla del ex apertura de Hindú y Los Pumas.

«Yo no tengo la verdad sino que fui construyendo mi verdad a través de estudios y sobre todo de la experiencia de la cancha. Yo tuve la suerte de tener 7 u 8 temporadas en el rugby amateur y otras 7 u 8 temporadas como profesional, somos la única generación que tuvo la posibilidad de hacer ese doblete»

«La gestión de equipos está muy relacionada a la gestión de seres humanos, de emociones y todo lo que eso conlleva»

La clave del éxito de un equipo es el compromiso, pero muchos lo toman como una causa y para mi el nivel de compromiso que va a marcar la diferencia en una competencia es una consecuencia de un proceso consistente y coherente»

«El primer paso es el autoconocimiento del coach, saber como pienso, como siento, cual es mi estilo de liderazgo, mi personalidad, como comunico, que me enoja, que me entusiasma. Saber cuales son mis puntos débiles y sobre todo mis puntos fuertes porque por ahí es donde voy a poder generar algo en mi equipo. También tengo que saber cual es el rugby que quiero que mi equipo juegue y tener mis convicciones»

«La visión es adonde quiero llevar al equipo, es como un sueño que uno es capaz de transmitir. Por eso se habla de inspirar»

https://www.instagram.com/p/B-rq1HupD7W/

«El primer paso es empezar a compartir mi visión con los jugadores basado en tres aspectos: definir el objetivo mayor, apoyado en objetivos de rendimiento; el segundo punto es la identidad: valores y características que nos representen como equipo. Aquí es muy importante darle participación a los jugadores. Y el tercer punto de esa visión es la cultura que es el cómo lo vamos a hacer, códigos, normas, reglas para optimizar lo que somos y darnos la posibilidad de ir hacia el objetivo. Serían conductas o comportamientos que son la parte concreta de los valores para que no solo sean una idea».

«El ser humano es un animal social. Está bueno crear esa sensación de tribu, tener nuestro lenguaje dentro del equipo. En Jaguares, por ejemplo, hicimos un laburo con remeros que es un deporte de mucha coordinación y de roles. Encontramos muchas similitudes, nos regalaron un remo y teníamos una tradición que era entregarle todos los lunes el remo al jugador que mejor había representado en la cancha los valores del equipo».

https://www.instagram.com/p/ByPvy5oHu9h/

«Está bueno establecer claramente los roles e ir construyéndolos entre todos. Primero el entrenador hace su laburo y después deja espacio para que entre todos construyamos los objetivos y los roles. Es importante que cada uno se apropie de su rol, que sepa que es determinante, que está aportando y a la vez que se haga responsable. El éxito colectivo depende del éxito individual de cada uno».

Cada miembro del equipo debe entender cuan importante es su rol para el equipo y a la vez saber que el equipo es lo más importante de todo».

«La motivación es uno de los grandes roles del entrenador. Si yo soy jugador cuanto más me impliqué en la formación de los objetivos, más propios los voy a sentir y es más natural que me motive».

«La motivación intrínseca está más en el entrenador que genera un contexto y la extrínseca viene por el lado del reconocimiento. En el rugby amateur hay que destacar más esos comportamientos deseados de hacer un poco más por el equipo».

El entrenador es un generador de certezas. Tenés que demostrar que sabés adonde vas. Te podés equivocar o mostrarte vulnerable pero hay que generar confianza en los jugadores».

«Para elegir los líderes, en Jaguares, una vez que definimos nuestra identidad y también le pedimos a los jugadores que cada uno escriba uno o dos jugadores que mejor representan cada uno de los valores que representan al equipo. Esos tres o cuatro tipos más nombrados son los líderes por comportamiento. Con el capitán es parecido, también es un poco el nexo directo con el entrenador y personalmente lo que más miro es el comportamiento más que las palabras. Son detalles casi invisibles que demuestran el nivel de compromiso que tiene con el equipo. Miro cuando y como habla, si lo hace de manera pertinente y cuando siente que puede aportar algo o si habla solo para escucharse o por decir algo. Y el último punto es cuanto lleva adentro esos valores del grupo».

«Si los roles de un equipo son los eslabones de la cadena, los lazos entre los miembros son los que hacen más sólida a esa cadena. Soy un convencido de que todo jugador es competitivo pero seguramente decidió jugar al rugby por ese sentido de pertenencia, de ser parte del equipo y ser apreciado. Por eso hay que darle lugar y espacio a que los jugadores se conozcan y fortalezcan esos lazos. Es algo que hace la diferencia y muchas veces esos lazos están pero con una mala gestión se pueden debilitar. Es un tema de compromiso con el de al lado».

https://www.instagram.com/p/B53vwt5JqqG/

«Naturalmente el grupo solo va identificando a los que no están participando o respetando todo eso que se construyó. El grupo lo va aislando solo y está en el entrenador demostrar coherencia a la hora de incluirlo o no en el equipo. Nadie es más importante que el equipo y la consistencia a la larga paga siempre. Otro punto clave para el entrenador es la empatía y transmitirle a los jugadores que uno valora más su esfuerzo o su actitud que su talento. Un tipo con un ego más importante no es un problema, hay que saberlo tratar y hacer todo el esfuerzo para que no se baje del barco».

«Trato de tener una empatía muy grande y escuchar a los jugadores, que se sientan queridos o tenidos en cuenta. Cuando vos no le das feed back el jugador lo toma como algo negativo. Y también trato de ser el mejor ejemplo de todo lo que exijo. También pienso que tengo una gran capacidad de soñar y soy capaz de expresar esos sueños que es algo que muchas veces genera adhesión».

El líder o el entrenador en resumen tiene que generar exigencia y confianza para que todos los miembros del equipo expresen su mejor versión con mucho entusiasmo, optimismo y energía positiva»