Los All Blacks volvieron a dar muestras de su enorme poderío y vencieron a Gales en Cardiff por 54-16 en el inicio de la ventana internacional de noviembre dentro de la que además Escocia goleó a Tonga, en Murrayfield, por 60 a 14.
Los hombres de negro pusieron bajo presión al campeón del Seis Naciones y en solo 4 minutos Beauden Barrett, quien llegó a su test match número 100 con la camiseta negra, apoyó el primer try.
Gales, con el apoyó de su público, hizo trabajar a la defensa neocelandesa y achicó la diferencia con un penal de Gareth Anscombe pero a los 18′ perdió a su capitán Alun Wyn Jones por una lesión en el hombro.
Poco a poco los All Blacks obligaron a Galés a defender muy cerca de su ingoal y fue estirando la diferencia con dos penales de Jordie Barrett y un try de TJ Perenara contra otro penal convertido de Anscombe.
Tras el parcial de 18 a 6 para la visita hubo un penal por lado hasta que los All Blacks volvieron a irrumpir en el ingoal local a través de Will Jordan. Esto no afectó la actitud de los Dragones Rojos y así fue como Tomos Williams aprovechó un kick de Rhys Priestland para marcar el único try galés.
La reacción de los All Blacks fue inmediata con dos tries apoyados por de Papalii y Sevu Reece y con la diferencia a su favor Nueva Zelanda sentenció el resultado con otras dos conquistas (Beauden Barrett y Anton Lienert-Brown) para cerrar un contundente 54 a 16.
La amplia diferencia da muestras del gran momento de los All Blacks, que ratificaron ser el mejor equipo del mundo en este momento y piensan en su próximo partido ante Italia, en Roma.