Los Pumitas siguen trabajando pese a la pandemia

Aunque el último Mundial juvenil fue en Rosario, en 2019, y el 2020 no tuvo competencias para los seleccionados juveniles, el staff de Los Pumitas encabezado por José Pellicena está trabajando intensamente, siguiendo la labor diaria de las Academias y los Centros de Rugby con la ilusión de poder tener una competencia internacional para que los chicos puedan reflejar el trabajo que la pandemia no detuvo.

Cochi Pellicena, Enrique Pichot y Andrés Bordoy, en su nueva función relacionada con los forwards, están recorriendo el país viendo jugadores y dialogaron con Rugby.com.ar sobre como encaran esta etapa en medio de la pandemia.

Todos los jugadores que forman parte de las Academias UAR 2021

La planificación: «La cancelación del Mundial cambió mucho nuestra planificación. En principio, no está confirmado, pero estamos intentando que el equipo tenga una competencia en junio o julio, algo similar al Mundial, de nivel internacional, y en base a eso restructuramos la planificación de lo que son las concentraciones. Este formato que ya empezamos a hacer en años anteriores, con respecto al M18, de hacer trials regionales y específicos por puestos la verdad que nos ha dado mucho resultado y en este contexto de pandemia y las limitaciones que tenemos para movilizar a los jugadores y concentrar mucha gente nos llevó a empezar a movernos más nosotros como staff para encontrarnos con los jugadores en sus regiones» (José Pellicena).

Las visitas a las provincias: «La planificación se restructuró, también la forma de trabajar y también la competencia que esperamos confirmar y es muy importante, para nosotros y sobre todo para los jugadores. Estuvimos en Litoral y en el Centro, en las Academias, e hicimos esta actividad para primeras y segundas líneas. En Mendoza inauguramos los trials para las camadas 2001-02 y 2003-04, fuimos a San Juan, Comodoro Rivadavia y la idea es replicarla y tenemos previsto visitas a Tucumán, Santa Fe, Salta, etc. Tenemos bastantes actividades programadas y estamos con mucho entusiasmo ya que vemos que además en cada lugar que visitamos se genera algo muy lindo con los entrenadores que participan. Estamos conformes, tuvimos que adaptarnos desde el año pasado pero siempre sacando lo mejor de esta situación inesperada que nos puso a prueba en todo sentido» (JP).

«El staff se modificó: estoy yo como cabeza, Quique (Pichot) ya estaba y se suma el Dogo (Andrés Bordoy). Alvaro Galindo sigue en lo que es la Academia NOA y Lucas (Borges) por ahora no porque el M18, por ahora, no tiene actividad definida. No quiere decir que el día de mañana no se forme» (José Pellicena).

Sin Mundial M20: «Como todos los que se quedaron sin viaje de egresados o sin alguna competencia esperada. Me imagino que es difícil para todos, después de tanto esfuerzo quedarte en la puerta es duro pero fue igual de difícil para todos. Los chicos se quedaron sin Mundial y nosotros como entrenadores después de un laburo que veníamos programando tuvimos que poner freno de mano y recalcular para salir adelante. Debe haber sido bastante duro para todos los chicos, sin dudas» (Enrique Pichot).

Deserción: «Nosotros no les ponemos que el Mundial sea un objetivo final, sino una transición de su etapa de M20. Hay un montón de jugadores que llegaron al seleccionado mayor y no fueron mundialistas de chicos. Este es solo un paso y por eso pienso que no hubo tanta deserción. La camada 2000 siguió su curso, algunos quedaron en las Academias y están con posibilidades de jugar en el equipo mayor. En la pandemia algunos pusieron un poco el freno, sobre todo a nivel de club, y ahora se volvieron a prender con la vuelta a la actividad. En los clubes creo que hay una baja de jugadores del 20 o 30% pero no tanto en la Academia» (EP).

“No solo buscamos acercarnos más a las distintas regiones sino que también vamos con el objetivo de conocer a más jugadores. Seguir de cerca a muchos que ya conocíamos y trabajar en sintonía con los mánagers de las academias y los directores de centros. Son momentos de vincularnos mucho con la región, con los entrenadores, con los clubes y está muy buena la bienvenida que nos dan. Siempre encontramos algún jugador que ha crecido y está bueno que podamos verlo en su ámbito» (José Pellicena).

La actividad: “En estos viajes incluimos una concentración de primeras y segundas líneas que nos permitió observar chicos desde temprana edad, para que en un futuro puedan integrar la Academia. Participaron jugadores que recomendaron los referentes de la región, entendiendo los perfiles sugeridos por parte nuestra. Los chicos estuvieron muy bien predispuestos y nos llevamos una grata sorpresa. Fue muy positivo” (Andrés Bordoy).

Gestión del conocimiento: «Habíamos hecho un gran laburo el año pasado respecto de la pandemia, identificando que iba a ser un año muy particular. Es un proyecto de gestión del conocimiento vinculado a preparar a los jugadores de una forma distinta. Antes un jugador juvenil se formaba a nivel individual en la Academia y cuando participaba de las concentraciones nacionales tenía todo un contenido a nivel de equipo. El año pasado hicimos que el jugador se prepare más a nivel de equipo a distancia, durante todo el proceso en el que no está en concentración. Así cuando llega a la concentración, toda esa preparación teórica a nivel de equipo ya la fue desarrollando y se fue haciendo protagonista de su propio aprendizaje. No va a la concentración a que le digan que hacer sino que va gestionando su aprendizaje para ir a la concentración y optimizar el tiempo de trabajo para minimizar el tiempo de concentraciones y ser más eficientes. Después nos pasó que no tuvimos concentraciones pero estamos contentos con lo desarrollado y creemos que es algo innovador» (JP).

Lesionados o excluidos: «Se lo acompaña hasta donde se puede. Si se lesiona y está en el sistema lo manejan los profesionales que forman parte del sistema en su región y los managers. Nosotros los acompañamos con algún llamado. Si quedan afuera no hay mucho para hacer, algunos siguen en las Academias y después podrán tener su oportunidad en el equipo mayor, como ha pasado más de una vez. Un ejemplo es Rodrigo Fernández Criado que no le tocó quedar en el grupo mundialista. A los chicos los acompañamos hasta donde se puede desde lo personal y no mucho más que eso» (EP).

«Los perfiles no cambian. El foco sigue estando, sobre todo en los forwards, en esos perfiles físicos necesarios para el alto rendimiento y mirando el futuro. Siempre se labura de la misma forma» (Andrés Bordoy)

Factor X: «Yo creo que se pone un perfil pero siempre se pone el ojo en la parte individual del talento, la personalidad y el factor X de ese jugador. Ponés una media pero si la persona o el jugador tiene un factor X que sobrepasa esa media no lo condicionamos porque sea más alto o más bajo. Si bien se tiende a que los jugadores sean fuertes no todos son iguales y esa es un poco la idea sobre las características particulares de cada jugador» (EP)

Referencias físicas: «El perfil muchas veces te termina limitando y te pone en un punto entre el sí y el no. Nos gusta hablar más de referencias físicas o antropométricas o técnicas, pero son referencias que no son excluyentes. Si tenemos claro que para competir a un altísimo nivel como al que los jugadores se terminan exponiendo en un Mundial M20 no podemos tener estructuras físicas pequeñas. Pero no dejan de ser referencias» (JP).

Los cambios de puesto: «En juveniles a veces uno no tiene la regla de oro y hay que ver como los chicos van creciendo. Uno siempre tiene la ilusión de que sigan desarollándose, sobre todo en la tercera línea que es el caso más puntual que suele cambiar a hooker por cuestiones de altura. Por ahí hay algunos aspectos específicos que cuestan más desarrollar pero aun así el jugador puede tener ese factor X que lo distingue del resto» (Andrés Bordoy).

Jugadores polifuncionales: «En los backs, si hay tipos de oficio, como un medio scrum, tiene que tener una característica muy especial para que lo hagamos jugar en otro puesto. En el resto nosotros vemos que un apertura puede jugar de centro o full back. Son características que para un determinando momento, como un Mundial, necesitas esa polifuncionalidad y no encasillar tanto a los chicos en un puesto determinado. Siempre vemos que otras características puede tener en otro puesto y así cuando tenés un lesionado en una competencia tenés tipos que son funcionales y es algo importantísimo» (EP).

La importancia de Jaguares XV: «Jugar el Super Rugby era algo que hacia crecer mucho al rugby argentino y estamos convencidos de que lo va a seguir haciendo crecer. Ha sido un salto de calidad tremendo. Jaguares XV, como ya se dijo, es un equipo de desarrollo excelente para los jóvenes que están en sus primeras armas a nivel profesional. La competencia es de muy buen nivel en lo regional y va a ir creciendo con el tiempo. El poco tiempo entre partido y partido también es un condimento interesante y pone a prueba a los jugadores, pero además, haciendo cuentas, casi el 50% de Jaguares XV participo de los últimos procesos juveniles y no tienen más de 22 años. Es algo espectacular y un lindo faro para los chicos jóvenes, sin olvidar que nuestros jugadores seguramente jueguen en este nivel, algunos podrán hacerlo en el Super Rugby en algún momento y otros volverán a sus clubes, con la importancia que eso tiene. El rugby profesional es para un grupo selecto y nosotros en el proceso juvenil hoy tenemos 136 jugadores en las academias. Sabemos que no todos van a llegar pero nuestro rol es seguir formándolos como personas para jugar en sus clubes y para que tengamos una sociedad mejor que en definitiva es lo más importante» (JP).