Entre Los Pumas, Argentina XV, el seven y Los Pumitas, más de 100 jugadores argentinos están participando actualmente de distintas competencias internacionales. Como es lógico, la mayor expectativa y gran parte del espacio en los medios de difusión está puesta en el desempeño y los resultados de esos seleccionados, pero no por eso se debe perder de vista que esos jugadores que hoy representan al país no son otra cosa que el fruto del trabajo que cada día hacen los clubes a lo largo y a lo ancho del país.
El domingo 10 de setiembre de 2017, en la cancha de Liceo de Mendoza, Marabunta de Río Negro perdió la final de la Copa de Plata del Regional Cuyano ante San Juan RC 23 a 18. Dos semanas más tarde, el sábado 23 de setiembre del año pasado, volvió a la misma cancha para lograr el ansiado ascenso al Top 8 Cuyano venciendo por 30 a 29 a un histórico del rugby del interior: Mendoza RC.
Subir a la máxima categoría del certamen que reúne a los mejores equipos de Mendoza y San Juan fue un premio a muchos viajes y esfuerzos que fueron destacados, a fin de año, en una muy buena nota del colega Jorge Búsico en el Diario La Nación.
Marabunta hizo su presentación en el Top 8 2018 la semana pasada recibiendo a San Juan RC (el mismo rival de aquella final perdida) e igualaron 17 a 17 pero una semana más tarde volvió al Liceo Rugby Club para enfrentar nada menos que al dueño de casa, subcampeón del Top 8 en 2017. Se trataba de un partido especial y el destino quiso que así fuera. De hecho el encuentro debía jugarse 3 semanas más tarde pero como había fin de semana libre y Marabunta debe jugar el sábado 30 de junio la final del Torneo del Interior B, el encuentro fue adelantado.
«Hace como 6 meses que teníamos armado el viaje a San Juan con las infantiles y juveniles para jugar y ver a Los Pumas con Gales, pero en los últimos días se dio todo para que además coincidiéramos para poder venir a Mendoza a acompañar a la Primera» contó Tomás Solari, el mismo que hace unos 20 años se destacó en Hindú y formó parte de Los Pumas. Quizás algunos no sepan que Solari se formó en Marabunta donde hoy es «entrenador, dirigente, de todo un poco».
Fue llamativa la presencia de «la peste verde» (como se autodenominan los fanáticos del equipo sureño) en la cancha de Liceo donde el propio Solari contó: «Vinimos con 7 micros. Infantiles son 210 pero también hay 3 equipos juveniles y chicas de rugby femenino, además de unos 40 entrenadores y muchos padres y dirigentes que nos acompañaron». Todo se alineó para un partido especial, incluso Solari destacó: «justo hace unos días fueron los jugadores de la primera a jugar con las infantiles. Tratamos de hacerlo 2 o 3 veces por año para que los más chicos se identifiquen con ellos». Y vaya si lo hicieron.
Con el aliento de chicos y grandes el equipo de Cipolletti dio vuelta un partido en el que perdía 13 a 3, pasó a ganar 30 a 13 hasta terminar festejando el 33 a 28 definitivo.
Entre los protagonistas estuvo el medio scrum Facundo Nogueira, quien este año jugó para Argentina XV y expresó: «Cuando nos dijeron que venían 6 micros de Marabunta fue una locura. No se nos podía escapar».
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El festejo, como ameritaba, estuvo lleno de emoción. «Esta cancha nos sienta bien» decían algunos de los más viejos mientras los chicos abrazaban a los protagonistas, Tommy Solari hacía su análisis y Mariano Santos, el entrenador, les reconoció a sus jugadores que «están poniendo al club en lugares en los que nunca estuvo».
Después todos celebraron mezclados, los jugadores, los más chiquitos y los más grandes, después de todo el triunfo era de todo el club.
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