Gabriel Travaglini no solo fue un gran jugador del CASI y de Los Pumas sino que hoy es el Vicepresidente 1ro de la Unión Argentina de Rugby y casi con seguridad será, a partir de marzo de 2022, el próximo presidente de la entidad madre del rugby nacional.
Durante más de una hora y media, en vivo a través del canal de twitch de #EdenPark, el ex octavo habló sin cassette de todos los temas de actualidad del rugby argentino.
La charla completa en el canal de twitch de #EdenPark
Balance del 2020: «La semana que viene tenemos una reunión de Consejo para hacer un resumen del año más intenso pero la verdad es que fue un año de aprendizaje para todo el mundo y muy cambiante. Siempre trato de ver el vaso medio lleno pero en esa misma reunión del 14 de marzo, cuando tuvimos que suspender toda la actividad, habíamos planteado 5 escenarios para el inicio de la competencia en 2020. Todos los meses lo fuimos corriendo y tachando, como en la generala».
Lo que se hizo: «Una de las ideas positivas de Desarrollo, encabezado por Ariel Mammana, fue que en dos meses tuvimos reuniones con todas las uniones que a su vez convocaron a los 540 clubes. Siempre el principal objetivo que tuvimos era volverle a dar vida a los clubes. Que al menos los chicos pudieran reencontrarse con sus compañeros y hacer alguna actividad física en el club para volver a darle vida».
Ayuda económica a los clubes: «Para algunos era poco y para otros era mucho. En una charla con Marcelo Corbalán, de Tucumán, él me decía ‘Para mi está perfecto, es lo mismo que encontrarse una billetera tirada en la calle para poder ayudar a los clubes’. También se le condonó a los clubes el pago del fichaje para que la FUAR pueda seguir teniendo sus fondos para asistir a los 31 chicos lesionados».
«Personalmente, no se si es por mi formación católica, no me gusta comunicar lo que hago. No tengo un ego tan grande para decir ‘che, miren lo que estoy haciendo’. Yo voy a salir a comunicar lo que tenga que comunicar pero salir a comunicar cada cosa que hago no es mi perfil».
La comunicación: «Somos conscientes de que hemos fallado mucho en la comunicación pero estamos trabajando bastante en eso y vamos a ver a algunas agencias de comunicación externas que nos ayuden«.
Próximo presidente de la UAR: «Era el acuerdo que se hizo en 2018 y aunque todos los días escucho que algunos dicen que lo quieren romper yo estoy tranquilo. A mi me eligen los presidentes de las uniones, si no me quieren me voy contento a casa. Yo lo único que quiero es laburar, si no quieren que labure seguiré laburando en mi club o donde me toque».
«Cuando Agustín (Pichot) me propuso ser presidente de la UAR le dije ‘no tengo ganas, no me interesa’. Insistió y le dije ‘bueno, pero si vos algún día venís y me decís Gabriel andate a tu casa, te doy un beso, un abrazo y yo pago el asado’. Yo siempre pienso lo mismo, mientras mi mujer y mis hijos no me insulten vamos para adelante».
Autocrítica: «Hubo comunicaciones que todavía no estaban definidas por el Consejo y se filtraron. Yo, personalmente, cada vez que pasaba eso me volvía loco. Cuando jugábamos si había un problema nos metíamos en el vestuario y lo arreglábamos ahí. Otra cosa que aprendimos es que los comunicados a veces no pueden esperar tanto y otras veces salen apurados y generan confusiones. Nos pasó en el tema de los tweets de los chicos. Nunca hubo una sanción hasta fin de diciembre. Lo otro era parte del proceso que corresponde en estos casos».
Los tweets: «Están los que minimizan diciendo ‘bueno, esto paso hace mucho’ y los que lamentablemente tenemos que decir que pasó hace mucho pero es algo muy grave. Lamentablemente quedamos en off side. Por ahí si era en un club, y no estamos representando al país, lo podríamos haber manejado de otra manera».
Sponsors: «Hay algunos que se han bajado y otros que nos preguntaron que íbamos a hacer respecto de los tweets. No tengo ninguna duda que vamos a conseguir sponsors porque el trabajo que se viene haciendo va a seguir creciendo y dentro de 3 años, si Dios quiere, vamos a tener un nuevo Mundial».
«Todos los días aprendemos cosas nuevas. Yo siempre digo que nunca fracasé sino que aprendí mil formas de no hacer las cosas mal».
Presiones externas: «Presiones no hubo. El mundo del rugby entiende que es un problema de tres jugadores y no de la UAR. Si es cierto que hubo llamados del presidente de la unión sudafricana y de World Rugby para ver en que nos podían ayudar para buscar una solución. Un llamado muy importante fue el de la DAIA con quiénes tuvimos una reunión espectacular e hicimos un encuentro muy valioso con Raúl Calvo Soler que está trabajando en el programa Rugby 2030«.
El triunfo ante los All Blacks: «Fue tanto o más impactante que la de Los Pumas del 65 y es resultado del trabajo de todos los que han vestido esa camiseta y de todo lo que se hace en el rugby amateur».
El rugby argentino del 2021: «Todavía seguimos tratando de insertar un equipo en una competencia. Nosotros tuvimos propuestas de Australia y Nueva Zelanda pero era un costo muy grande y había que instalar el equipo 6 meses allá. Sudáfrica en principio también nos había invitado pero después tuvieron un pico y cerraron las fronteras. También planteamos ir a jugar a la Liga Celta, adonde va a ir ahora Sudáfrica, pero fijate que ahora esa liga no está tan clara por la pandemia. Por otra lado, el año pasado nos vimos en la necesidad de liberar a los jugadores y afortunadamente de los 46 que teníamos creo que ahora solo quedan 12 con contrato y dos de ellos están avanzando para poder irse. Si tenemos cerrado, para Los Pumas, el Rugby Championship, la ventana de julio y la de noviembre».
«Siempre en el rugby hubo recambio. En el 77 hubo 35 jugadores de Los Pumas que los borraron de un plumazo y se comieron 2, 3 y hasta 5 años de suspensión, pero apareció un equipo nuevo, se formó y tuvo los éxitos que tenía que tener. Cuando terminó de jugar la generación del 2007, la de la medalla de bronce, también aparecieron otros jugadores. eso no me preocupa».
La Superliga Americana: «Aprovechando la experiencia del año pasado planteamos al board de la SLAR que los jugadores argentinos salgan de una lista elaborada por la UAR, a través de Francisco Rubio. Muchas veces he discutido con dirigentes de la URBA y yo les digo que los jugadores son invitados a jugar al rugby y el 98% dice ‘si, voy’ como también otros, como paso con Santiago Grondona hace un par de años, pueden decir que no. Después, Argentina tiene que ayudar a que la región crezca. Ojalá dentro de unos años no tengamos que jugar el Rugby Championship porque ya tenemos competencia fuerte en la región».
Conflicto con Ceibos: «Si tenemos un problema legal en puerta no lo se pero nuestro contrato siempre fue muy específico en que si el formato de la competencia cambiaba, la UAR tenía la posibilidad de reordenarlo. El objetivo de Ceibos era tener una sede en el país con todo lo que eso implicaba. Hoy eso desapareció porque la SLAR se hace en dos burbujas, en Chile y Uruguay, en las que se va a jugar cada 4 días. No deberíamos tener un problema en los tribunales porque estamos actuando de acuerdo a la previsión que tenía el contrato con Sudamérica Rugby y que se replicaba en el contrato con Ceibos».
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El éxodo a Europa: «Ahí tenés dos cosas: el que realmente busca una salida económica y profesional que no pudo encontrar acá y el que tiene ganas de irse y sabe que con 1.000 euros, casa y comida se divierte y la pasa bien. En la lista que se hizo para la SLAR hubo jugadores que se bajaron por estudio o por otros motivos. Hasta el 2019 se iban 200 jugadores a Europa y no los podías parar. Hiy muchos se han recuperado como Sclavi (Joel) o Santiago Socino. La verdad es que no podés frenar esa salida ni tampoco privilegiar a una unión u otra porque tiene mejores jugadores».
Las declaraciones de Ariel Mamanna en La Nación: «No tuve oportunidad de hablar con Ariel pero evidentemente se equivocó o dijo que estaba cansado de que haya críticas y no haya respuestas. Desde 2018, cuando asumimos, hubo filtraciones y decidimos ordenar la comunicación. A Ariel se la escapó eso. Probablemente en muchas cosas que dijo concuerdo pero en otras se extralimitó y eso genera confusión. Yo no diría ‘La UAR tiene mala comunicación’ cuando yo soy la UAR».
Hugo Porta: «Hace rato que no hablo. El planteo que hizo en esa carta que se publicó para mi está fuera de lugar. Yo tuve diálogos con algunos presidentes que mandaban notas dirigidas a la UAR pero las mandaban a la prensa. ¿Porque no esperaban que las contestáramos en vez de mandarlas a la prensa? Ninguna de las críticas de Hugo, del Topo Rodríguez, del Chapa Branca o de los clubes que pedían la renuncia del Consejo Directivo llegaron a mi personalmente, ni a la UAR tampoco. Pero con Hugo me llevo bien, lo quiero mucho».
UAR rica y clubes pobres: «Yo tuve una charla con Hugo hace dos años y el me planteaba ‘Cómo puede ser que la UAR sea rica y los clubes pobres’ y yo no lo veo así. La UAR no es rica, genera recursos que ha ido guardando para un proyecto de un Centro de Alto Rendimiento. Y después, he tenido la suerte de viajar y visitar clubes por todo el país y la pobreza no está en el bolsillo sino en el espíritu. Nunca vi un club pobre en Argentina. Con los ingresos que tiene la UAR paga el producto (jugadores), la estructura y el resto lo invierte en el rugby amateur con capacitaciones, centros de rugby, torneos regionales, etc. Si yo todos los ingresos los repartiera entre todos los clubes ¿al mes siguiente que hacemos?».
«Cuando yo jugaba todos me aplaudían y nadie me criticaba; cuando dejé de jugar y me puse la joggineta de entrenador me criticaba la mitad y la otra mitad me aplaudía; y cuando me puse la corbata para ser dirigente son todas críticas. Por eso hay muchos jugadores y pocos dirigentes».
Ser dirigente: «Nunca hago algo para esperar a ver que me dan de vuelto. Tengo que devolverla al rugby lo que el rugby me dio. Yo dejé de jugar a los 40 porque Ricardito Alvarado me llamó para que jugara en Primera y le dije ‘si el CASI necesita que un tipo de 40 años juegue en Primera estamos en el horno’. Ese día, junio del 98, dejé de jugar. Yo en el 2012 me quede sin laburo, me tuve que rearmar y coseché todo lo que había sembrado en tantos años de rugby. No lo digo por mi, pero el tipo que es bueno adentro de la cancha es bueno afuera, y al que es malo adentro hay que mirarlo con cuatro ojos afuera«.
La presidencia de la UAR: «Este acuerdo que me va a poner a mi en ese lugar se hizo para corregir el hecho de que los últimos tres presidentes de la UAR fueron de las provincias, pero haciendo un mea culpa hasta que la UAR se separó de la URBA las provincias prácticamente no tenían lugar ni en el Consejo. Lo mismo pasó en los seleccionados. Tenemos que ser más abiertos y poner a los mejores, porque la UAR es un equipo».
El Nacional y el Argentino: «Yo fui uno de los que empuje para potenciar el Nacional de Clubes pero el Torneo de la URBA es tan parejo que después los jugadores no tenían ganas de jugarlo. Además, no dan las fechas. Sobre el Argentino hay estadísticas de partidos de Buenos Aires a los que iban 300 personas, y después hay un problema de fechas. En el 85 salimos campeones con el CASI el 3 de septiembre y después teníamos dos meses para prepararnos y jugar el Argentino. Hoy el torneo termina el 3 de noviembre. El Pollo Corbalán (presidente de la Unión de Tucumán) me decía que es importante que La Naranja juegue y yo le dije armá un torneo, trae dos equipos de afuera, invitá a Córdoba, poné la guita, llená la cancha y ganá guita. Nadie prohíbe hacer eso. Córdoba lo hizo con Uruguay y Brasil hace un par de años».
Los nuevos inversores del rugby internacional: «Yo lo conocí a Bernie Ecclestone cuando trabajaba en Philipp Morris y es un tipo que le saca plata a las piedras. Es bravo pero me gustaría tenerlo adentro. De todos modos hay que tener cuidado porque la guita es buena siempre que no maneje al juego. El rugby convoca mucha audiencia y si no fuese negocio esos inversores no se meterían. Me acuerdo en 2002, cuando yo me fui de ISL, íbamos a Sudáfrica con Hugo muy seguido y ellos ya nos decían que el Tri Nations era una pesadilla por los viajes y cambios de horario. Para ellos el mejor huso horario, en ese momento nos decían que era jugar con Irlanda y Argentina, no más de 5 horas de diferencia ni 8 horas de viaje».
La UAR que viene: «Lamentablemente la vuelta a la competencia de este año está cada vez más dífícil pero la idea es que sea una transición para que los clubes vuelvan a tener movimiento. Viendo lo que está pasando en Europa es muy difícil saber que va a pasar con la pandemia pero en el futuro tenemos que ser muy eficiente en la administración de los recursos y muy analíticos con las competencias que podamos encontrar para nuestro rugby profesional y que nos generen ingresos confiables».