Sudamérica Rugby confirmó hace pocos días la disputa de la Superliga Americana de Rugby para 2021 y para conocer más detalles de esta competencia que la pandemia interrumpió en 2020, en #EdenParkArg dialogamos en vivo con Daniel Hourcade, Gerente de Alto Rendimiento de Sudamérica Rugby.
«Estamos muy contentos de haber podido confirmar la Superliga para 2021, aún con algunos detalles pendientes que se resolverán en estos días. Se hace en un formato muy especial, en dos sedes tipo burbuja, con todos los equipos en un mismo lugar y vamos a ir de una sede a la otra, sin volver a casa, para minimizar riesgos de contagio. Es decir que los jugadores van a estar dos meses fuera de sus casas, en competencia, más un mes y medio de preparación. Quiero resaltar la buena predisposición de todos los involucrados para que se haga el torneo, algo que en la situación actual es un logro inmenso. Estamos felices pero sabemos que tenemos una ardua tarea por delante y una responsabilidad gigante», enfatizó el Huevo.
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«La prueba que pudimos hacer con el Sudamericano 4 Naciones en octubre sirvió muchísimo porque nos encontramos en un mundo nuevo y Hay un montón de detalles que son fundamentales. la prioridad absoluta es la salud, el bienestar del jugador y tercero el juego»
La parte económica: «Fue una de las discusiones porque la situación de las uniones es dificultosa pero hemos bajado los costos a una tercera parte de lo que eran el año pasado. Eso implica un sacrificio gigante de todos y tengo que resaltar a los jugadores que van a tener un salario único. Yo lo comparo con la época de Pampas en la que los chicos no eran profesionales, algunos tenían una beca y por jugar la Vodacom Cup recibían un dinero irrisorio que se lo gastaban en la semana santa que tenían libre. No tenían el dinero en la cabeza sino la posibilidad de jugar y de mostrarse para llegar al seleccionado nacional. En este caso es un esfuerzo gigante, sobre todo para los chicos que ya vienen cobrando. No vamos a hablar de cifras pero es prácticamente jugar gratis».
Los costos: «Hemos trabajado mucho para reducir costos. Cada franquicia paga un fee de ingreso al torneo que incluye traslados, alojamientos, comidas, salarios de los jugadores, movimientos internos, etc. El monto de ese fee es menos de la tercera parte de lo que significaba una franquicia media el año pasado. Fue difícil pero había que ser generosos y lo fueron todos porque sino no se hubiese podido realizar y lo que todos queremos es volver al juego con el mejor torneo posible. Cada equipo paga el fee y Sudamérica Rugby se encarga de todo porque es más fácil negociar un paquete a que cada uno vaya por su lado».
Los jugadores: «Trabajamos mucho con la UAR, que también está replanteando su sistema de alto rendimiento, y la idea es que los jugadores del sistema que estén a disposición para la Superliga jueguen en la franquicia argentina y refuercen las demás franquicias. Solo hemos puesto un número mínimo de jugadores nacionales que es de 23 en el caso de Argentina, Uruguay, Chile y Brasil y 15, por lo menos el equipo titular, para Colombia y Paraguay que tienen un nivel menor. Esto es sobre un total de 30 jugadores que tendrá cada equipo, una cantidad que no es la óptima pero tuvimos que reducirla por un tema de costos. La única regla es ese mínimo de jugadores nacionales. Después, en vez de 23 pueden ser 28 y solo un par de extranjeros, que no es obligatorio que sean de Argentina pero lo lógico es que lo sean porque un neocelandés, por ejemplo, les va a salir más caro».
El draft: «Todos los jugadores argentinos que sean convocados por las demás franquicias deben ser canalizados por la UAR, que ya informó a las uniones provinciales y habló con los jugadores uno por uno porque no podemos disponer de un jugador que tiene otros planes o no le interesa jugar la liga. Hay que ser prolijos y respetuosos. Una vez que tengamos el listado de los jugadores disponibles vamos a hacer un draft en el que por ranking primero elije Paraguay 3 jugadores, después Colombia otros 3 y después el resto uno cada uno. Así hasta completar los planteles. Creemos que es un sistema que permitirá equilibrar los equipos lo mejor posible».
La preparación: «Los equipos empiezan la pretemporada en la tercera semana de enero y la semana que viene o la próxima haremos el draft aunque ya todos tienen en su cabeza los jugadores que quieren. Va a ser una experiencia nueva y quiero resaltar la confianza y el respeto que hay entre todos los entrenadores y equipos lo que hace que todo sea más fácil».
Los entrenadores: «Estamos trabajando también sobre los staff técnicos que es algo fundamental. Puntualmente Colombia es una franquicia que se incorpora, tiene un staff que está creciendo pero no tiene experiencia y puede tener 14 o 15 jugadores argentinos que necesitan un apoyo desde lo técnico. Lo que está reglamentado es que tienen que haber sido entrenadores nacionales o haber aprobado la Academia de Sudamérica Rugby en la que el año pasado de 29 entrenadores hubo 13 que aprobaron, más los 5 del año anterior, son 18 entrenadores elegibles, además de los que han sido entrenadores nacionales. Las decisiones de a que entrenadores o jugadores contratar no las tomo yo sino cada unión o franquicia. Mi función es lograr el mejor nivel de juego para eso necesitamos los mejores jugadores y entrenadores posibles, después cada país trabaja a su manera».
La relación entre las franquicias y los seleccionados nacionales: «Hay un poco de todo: buscamos buen juego y también está la preparación de los seleccionados porque este año empieza la clasificación al Mundial. Hay una pre qualy en la que van a jugar Chile, Brasil, Paraguay y Colombia, dos de esos equipos pasarán a jugar con Uruguay y de ese triangular saldrán los dos primeros que se cruzan en noviembre con Estados Unidos y Canadá para definir los dos clasificados al Mundial y el tercero que irá al repechaje en 2022″.
Con la cabeza en las eliminatorias para el Mundial: «La idea es que todos tengan la posibilidad de ganarse en la cancha la posibilidad de ir al Mundial. Por eso esta Superliga es importantísima y queremos que las uniones apuesten a sus propios jugadores. Por ejemplo, se que Uruguay va a reforzar solamente los puestos en los que los titulares del seleccionado están jugando en el exterior. Por ejemplo, si el medio scrum está en Castres (Santiago Arata) buscarán un medio scrum que cubra en la franquicia ese lugar que ellos ya tienen cubierto en Los Teros. Para las uniones es un desafío muy grande y los 7 refuerzos parecen poco pero van a ser jugadores de muy buen nivel».
La comparación de esta época con la de Pampas: «Los proyectos tienen que adecuarse a la realidad que muchas veces no tienen nada que ver con lo ideal. Hoy para ese ideal no están dadas las condiciones. Los chicos que se están yendo son profesionales y mantenerlos jugando en el mejor nivel posible creo que es la mejor salida, lo que no significa que sea lo mejor para Argentina. El nivel de la Vodacom Cup era un nivel intermedio, que tampoco era fácil, pero estar 3 meses juntos, entrenando y dedicándote al rugby ya es un plus. Las pruebas están en el Mundial 2011 donde fueron 9 chicos de Pampas y ni hablemos del 2015 al que fueron 25 jugadores formados en Argentina. No es el formato ideal pero está probado que funciona. Sino nos podemos remitir a lo que pasó con Chocobares (Santiago), Cinti (Lucio) o Miotti (Domingo) que debutaron y parecía que hacia 20 años que jugaban en Los Pumas. Eso habla a las claras de lo que se hace en las Academias porque esos chicos se formaron compitiendo en Argentina XV o en Los Pumitas».
«Nadie sabe que va a pasar a partir del 2022. Esperemos que podamos volver a tener Súper Rugby, el vínculo con SANZAAR no está roto, los equipos australianos no están apoyando contratando a nuestros jugadores. Sin embargo también hay que pensar en los que no se van a jugar afuera y la Superliga es un torneo al que queremos hacer crecer».
El proyecto de la UAR: «Primero la necesidad era una competencia continua, estable y de primer nivel. Se intentó entrar al 6 Naciones, no lo permitieron y fuimos al Hemisferio Sur. Siempre la idea era competir al mejor nivel y a la vez ir armando algo propio. No se si era un proyecto sustentable en el tiempo, incluso tener una sola franquicia tampoco era lo ideal y tener dos era económicamente imposible. Teníamos que ir hasta donde se pudiera y mientras preparar algo para hacer crecer la región y así tener una competencia cercana y sustentable. Es como en el club: si le das todo a la primera y descuidas abajo llega un día en el que te quedás sin nada. El crecimiento de la región es fundamental para todos. Hoy son 6 países pero queremos que los demás, poco a poco, puedan entrar en el alto rendimiento. Es un trabajo a largo plazo, aunque la pandemia precipitó muchas cosas. Nadie pensaba que se podía desmantelar todo de un soplido pero hay que recalcular y empezar de nuevo. Para mi, en el futuro tenemos que tener un producto propio donde ojalá Argentina pueda tener cuatro franquicias compitiendo al mejor nivel sin tener que viajar 150.000 km. por año. Quizás yo no lo voy a vivir pero en algún momento había que empezar».
La SLAR como vidriera: «Cualquiera de las franquicias es una posibilidad de mostrarse y más en este formato en el que vamos a estar todos juntos. En nuestra época laburábamos todo el año para un partido: contra Buenos Aires en el Argentino. Había que jugar bien ahí para que quizás te tengan en cuenta para Los Pumas. Hoy hay 50 y pico de jugadores que tendrán la posibilidad de mostrarse para Los Pumas o para Argentina XV o Jaguares XV que va a ir a la Currie Cup. No se como va a ser la disponibilidad de jugadores para la ventana de julio pero sin dudas los que se queden van a ser observados por los entrenadores y tienen la posibilidad de mostrarse donde corresponde: en la cancha».
La incorporación de Colombia: «El año pasado iban a jugar solo un par de partidos y algunos jugadores fueron a la franquicia de Uruguay. Para entrar este año tuvieron que hacer muchas cosas, más allá de lo deportivo. Cambiar los estatutos era una tarea ardua y resalto la figura del gran Vicky Luaces que los apoyó mucho. En lo deportivo vienen trabajando muy bien pero necesitan la competencia para seguir mejorando y aunque había dudas y los tiempos eran muy justos hicieron algo increíble para poder jugar. Es para aplaudirlos».
El crecimiento de Colombia: «Colombia es una esponja. En octubre de 2018 Mauro Henao nos dijo ‘¿qué tenemos que hacer para mejorar?’ y les dijimos ‘armen una competencia que reúna a los mejores 150 jugadores para mejorar la competencia interna’. En semana santa de 2019 fui y se estaba jugando esa liga. Tienen mucho apoyo del estado y es un país que en muchos deportes tiene mucha experiencia de lo que es el alto rendimiento. Les falta mucho camino por recorrer pero son los mejores alumnos y ahora están sumando apoyo privado. Además, en femenino se clasificaron a los Juegos Olímpicos de Río y en el quince, también femenino, le ganaron a Brasil. Están muy bien encaminados».
España y Portugal a la SLAR: «Habíamos empezado a hablar en enero, en Londres, en una reunión con los países del Tier 2. World Rugby planteó a todos la necesidad de tener un equipo pathway inserto en una competencia que sirva para desarrollar a sus jugadores, poniendo como ejemplo lo que fue Pampas. Georgia iba a jugar en 2021 lo que antes era la Vodacom Cup en Sudáfrica, Rusia y Rumania también apuntan a eso a partir de 2022, y con España y Portugal hablamos de que se sumen a la Superliga. Después no se avanzó por la pandemia y en 2021 lo retomaremos pero también tienen que cumplir con armar una estructura y una organización para que ese equipo sea parte de un proyecto. Las puertas están abiertas pero nunca pasó de una idea».
El rugby de la región para 2021
Seven: «Teníamos programado hacer dos torneos en Viña, en febrero, invitando a Nueva Zelanda, Australia, Sudáfrica y Fiji, pero World Rugby nos dijo que no venía ninguno de esos equipos y en la situación actual hacer otro Sudamericano no era la mejor inversión. Lo vamos a hacer más adelante porque todos los equipos necesitan prepararse para los Juegos Olímpicos».
Las sedes de la clasificación al Mundial: «La prequaly va a jugarse en una burbuja y el triangular de los dos que se clasifiquen más Uruguay va a ser en Uruguay porque es el de mejor ranking y reúne las condiciones. Las demás instancias, son de ida y vuelta. Si hacíamos ida y vuelta en la prequaly no daban los tiempos y no le podíamos dar la posibilidad de participar a Colombia y Paraguay».
Las competencias juveniles: «En juveniles lamentablemente no va a haber mundiales pero se está armando un torneo de M20 en Oceanía, para 8 equipos, donde está invitado Argentina y estamos viendo si se puede sumar otro equipo del continente. Vamos a tener un Sudamericano previo y también en M19 vamos a hacer dos eventos en los niveles A y B. Todas las categorías van a tener competencia desde Sudamérica».
El triunfo de Los Pumas ante los All Blacks
«Siempre en la adversidad afloró lo mejor de Los Pumas pero igual esta vez no era suficiente para pensar que la podíamos ganar a los All Blacks. Era el peor escenario pero afloró todo eso y también hubo juego, no solo huevo y corazón. Hubo una muy buena defensa en todo el torneo y contra los All Blacks el equipo intentó atacar y mostró cosas importantes. Fue una alegría tremenda. Yo siempre dije que le íbamos a ganar algún día a los de negro aunque éste era el momento menos esperado. Algún día le íbamos a ganar y no va a ser la última, porque esto es consecuencia de un proyecto. Lo que hizo el equipo fue espectacular. Fue el sueño que no pude vivir como entrenador pero lo disfruté mucho desde acá».